Derrota chilena de local
Con no mas de 12.000 personas, Chile cayó de local frente a su similar de Colombia, en un amistoso aprovechando la fecha FIFA. Si bién todos estabamos ilusionados con una buena actuación de Chile, merced de las grande actuaciones realizadas en el viejo mundo y con "tridente mágico" compuesto por Matías Fernández, Luis Jiménez y Jorge Valdivia, los de la Roja no pudieron superar al combinado cafetero terminando en un 2-1 adverso.
Algunos ya crucificaron a Claudio Bravo por su error en el segundo gol y a ambos magos por que en teoría sus mentes estaban en sus problemas amorosos y faranduleros en vez de estar en la cancha. Dejenme decirle a estas personas que si bién hay algo de razón, tampoco es para botar un proceso de prueba que se viene realizando previo al Mundial, por una sola derrota.
Chile salió a la cancha con Bravo en el pórtico, una linea de cuatro defensas formada por Jara, Zenteno, Rojas y Olarra, dos volantes de contención: Maldonado y Sanhueza, el tridente mágico formado por los talentosos Fernández, Jiménez y Valdivia y solo en punta, Humberto Suazo.
La formación -ofensiva- daba para creer en algunos goles y derrotar sin mayores sosobras a la selección colombiana, pero no fue así. Colombia entró decidida a cerrar los espacios en la zona de creación y apostando al contragolpe por los costados, labor que realizaron de muy buena manera y complicó el mediocampo nacional. Valdivia, para mi el mejor de los tres, estaba "apretado" por el retraso de Jiménez, que mas que actuar como segunda punta, algo recostado al medio, se metía entre Valdiva y Fernández y ninguno disponía del espacio necesario, donde también Colombioa imponía por ratos dobles marcas a los que recibieran el balón.
Suazo, muy solo, anduvo algo errático y no fue el agente ofensivo que se esperó. Fernández no contribuyó mucho al juego como se hubiese esperado, pero mal no anduvo. Claudio Maldonado estaba lesionado. Y se notó. Con una impresición rarísima en él, nunca fue el desahogo del mediocampo y cometió muchos errores. Sanhueza abusó de la falta y se notó nervioso. La defensa fue sin dudas la línea mas baja. Jara también jugo lesionado y no dio seguridad por su banda y fue de él la responsabilidad del primer gol, al no cubrir a Preciado, estando algunos metros delante de él. Olarra fue un pasadizo -hay que decirlo, siendo que para mi en la gira europea lo hizo excelente de lateral izquierdo- y Rojas, pese a la gran lucha que ejerció tampoco dio frutos. A Zenteno se le notó la suplencia en Católica y quizás no debió haber jugado.
Bravo jugó bién, estuvo atento y sólo tuvo dos errores: el primero, una salida algo precipitada luego de un fuertísimo centro, alcanza a desviar el balón que posteriormente se iría por el fondo, pero si analizamos ésto, quizás si Bravo no sale, era el primero de los colombianos; y el segundo error, sabiendo de sus cualidades por arriba y el ímpetu de ganar, no logra controlar un balón por arriba y Soto convierte el segundo y definitivo gol del triunfo. No hay que "echarlo abajo". Se equivocó, claro, pero aún quedan muchos encuentros y este error le va a servir dentro de la larga maduración que necesita un arquero.
Los cambios que introdujo Acosta no dieron frutos. Paredes algo volanteó por izquierda, pero no fue suficiente con una cerrada defensa colombiana. Iturra mostró el bajo nivel que está mostrando la Universidad de Chile y no dió solución al quite de balón del mediocampo, Fierro debía ser variante por derecha pero no desequilibró y Sánchez entró sin efectividad. Al menos ambos sumaron minutos y eso es importante.
Algo apesumbrado por el resultado, sigo creyendo en este proceso y la clasificación al Mundial. Queda un larguísimo camino y si se sigue trabajando -aunque suene cliché- se cumplirán las metas. Vamos Chile.